Justo cuando acabo de ver la cuarta temporada de The Wire (según Boyero “el retrato más lúcido y pavoroso de los mecanismos del narcotráfico”), y estoy deseando conseguir la quinta y última, encuentro estas dos referencias en la prensa:
Enric González habla con Dennis Lehane, Babelia, 13/2/2010:
“¿Se ha fijado en que ninguna serie de televisión aguanta bien más allá de cinco temporadas? The Wire llegó a la quinta, y llegó bien, pero la quinta fue peor que la cuarta. Se alcanza un punto en el que hay que forzar demasiado a los personajes. ¿Podíamos los guionistas de The Wire inventar nuevas formas de putear al pobre McNulty?”
Enric González habla con Dennis Lehane, Babelia, 13/2/2010:
“¿Se ha fijado en que ninguna serie de televisión aguanta bien más allá de cinco temporadas? The Wire llegó a la quinta, y llegó bien, pero la quinta fue peor que la cuarta. Se alcanza un punto en el que hay que forzar demasiado a los personajes. ¿Podíamos los guionistas de The Wire inventar nuevas formas de putear al pobre McNulty?”
[The Wire = Pure Genius, según fakechozostatue]
David Trueba, "Literatura", El País, 18/2/2010:
“En los últimos días han presentado novela en España dos autores norteamericanos: Dennis Lehane y Richard Price. A la hora de popularizar su obra las adaptaciones al cine han jugado un papel fundamental. El primero es el autor de las novelas en que se basan Mystic river, la película de Clint Eastwood, o la última de Scorsese (Shutter island), que se estrena mañana. El segundo ha sido adaptado por el mismo Scorsese o Spike Lee. Pero ambos en los últimos tiempos son reconocidos por haber participado en los guiones de la serie de HBO, emitida aquí por TNT, The Wire. El creador del monumento televisivo fue el periodista David Simon, un tipo que logró hacer creíble la peripecia de traficantes de drogas, políticos y policías en la ciudad de Baltimore. The wire, aunque no fue un éxito de audiencia en casi ningún país, significa una cumbre entre las series de ficción televisivas. Sus 60 episodios en cinco temporadas se guardan y se consumen como un tesoro que para muchos alcanza la calidad de un Balzac, con la narración certera y poderosa del mundo actual.
En el consumo audiovisual casi frenético, con opciones para disfrutar de casi todo el producto norteamericano, se nos olvida que detrás de la mejor ficción casi siempre emerge la calidad literaria. Algo tan desprestigiado como la palabra escrita es el fundamento de la mejor apuesta visual. Para escribir una serie de altísima calidad, David Simon recurrió a historias reales, investigación periodística y profesionales de la escritura como Price, Lehane o George Pelecanos, acostumbrados a alquilar su teclado al cine o la televisión. Esa letra bien escrita es la que le da a la música de The wire una categoría especial. Por encima de apuestas más consumidas y premiadas, como Perdidos, que acaba de empezar a emitir su última temporada para placer de adictos, y que explota los recursos del entretenimiento, la tensión y la capacidad de sorpresa, aprendidos más entre palomitas que en la experiencia vital. No roza la altura literaria, el poso y la increíble verosimilitud de ejemplos como The wire.”
“En los últimos días han presentado novela en España dos autores norteamericanos: Dennis Lehane y Richard Price. A la hora de popularizar su obra las adaptaciones al cine han jugado un papel fundamental. El primero es el autor de las novelas en que se basan Mystic river, la película de Clint Eastwood, o la última de Scorsese (Shutter island), que se estrena mañana. El segundo ha sido adaptado por el mismo Scorsese o Spike Lee. Pero ambos en los últimos tiempos son reconocidos por haber participado en los guiones de la serie de HBO, emitida aquí por TNT, The Wire. El creador del monumento televisivo fue el periodista David Simon, un tipo que logró hacer creíble la peripecia de traficantes de drogas, políticos y policías en la ciudad de Baltimore. The wire, aunque no fue un éxito de audiencia en casi ningún país, significa una cumbre entre las series de ficción televisivas. Sus 60 episodios en cinco temporadas se guardan y se consumen como un tesoro que para muchos alcanza la calidad de un Balzac, con la narración certera y poderosa del mundo actual.
En el consumo audiovisual casi frenético, con opciones para disfrutar de casi todo el producto norteamericano, se nos olvida que detrás de la mejor ficción casi siempre emerge la calidad literaria. Algo tan desprestigiado como la palabra escrita es el fundamento de la mejor apuesta visual. Para escribir una serie de altísima calidad, David Simon recurrió a historias reales, investigación periodística y profesionales de la escritura como Price, Lehane o George Pelecanos, acostumbrados a alquilar su teclado al cine o la televisión. Esa letra bien escrita es la que le da a la música de The wire una categoría especial. Por encima de apuestas más consumidas y premiadas, como Perdidos, que acaba de empezar a emitir su última temporada para placer de adictos, y que explota los recursos del entretenimiento, la tensión y la capacidad de sorpresa, aprendidos más entre palomitas que en la experiencia vital. No roza la altura literaria, el poso y la increíble verosimilitud de ejemplos como The wire.”
4 comentarios:
está muy bien el video!
Es que está muy bien la serie. La serie con más nigers por metro cuadrado, acorde con Los Soprano que era la serie con más obesos por ídem.
Gracias por habérmelas dado a conocer. Ahora espero tu próxima recomendación. And see you next week.
Yo como madre con hijos y sin tele llego con cinco anyos de retraso a todas estas :D
Empezamos (SM y la servidora) con los Soprano en Noviembre y la verdad es que nos encanto.
Un supersaludo
Bueno, más vale tarde que nunca, SW. No sé si habeís visto sólo la primera temporada, o toda la serie, en cuyo caso os habéis dado un buen baño. No hay nada como poder ver las series al ritmo que uno quiere y no con la dosificación semanal de las cadenas de televisión.
Que tengas una interesante próxima superserie.
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